Navalonguilla, comenzando temporada

Comienza la temporada y el destino elegido fue Navalonguilla, debido a que Avila abre la temporada antes que otras provincias cercanas y a las buenas referencias que encontramos en internet sobre este coto. Completamos nuestras cajas con imitaciones de los impronunciables ecdyonuridos y tricolores que en teoría iban bien para este coto

El día amaneció nublado, algún claro dejaba entrever levemente algún rayo de sol y de momento el frio y el viento nos respetaban

Comenzamos nuestra jornada en el tramo superior de coto. Desde el puente en una buena poza se veía el agua calma y cristalina. Sin dificultad se veía merodear medianas truchas por el fondo.

Todo hacía presagiar una buena jornada.

Sin embargo, la realidad fue diferente. Mientras Santi y Antonio decidían probar suerte en la tabla mencionada, yo con mi ninfa atada en el bajo me dirigí rio abajo con la esperanza de encontrar algún rápido interesante en el que presentarla.  Los rápidos con un caudal apropiado, no existían, el río estaba muy bajo de caudal y dejaba al descubierto grandes cantos que me hacían difícil caminar.

Entre chorreras íbamos encontrando algún remanso, pocos con la profundidad adecuada para albergar alguna trucha de tamaño medio. No podía pescar a ninfa, así que continué paciente, con la esperanza de que alguna eclosión pudiera activar a las truchas y nos permitieran obtener alguna captura a seca. Vimos algún díptero, pero ninguno de los tres conseguimos ver ni tricópteros (muy presentes en el lecho del rio), ni efémeras. Quizá era demasiado pronto.

Mas o menos en la mitad de nuestro recorrido, consigo ver algunas truchitas en dos claros arenosos, inéditas hasta el momento salvo en la tabla inicial. Me aproximo sigiloso pero las del primer claro desaparecen a unos 10 metros de mi presencia. Decido quedarme ahí e intentar lanzar largo a las del segundo claro, tras un rato agazapado probando con distintas imitaciones, Santi y Antonio se ponen a mi altura y aunque les aviso y se acercan de la forma más sigilosa posible, las truchas advierten su presencia y desaparecen raudas bajo las piedras.

El día va transcurriendo y el rio no nos lo pone fácil, seguimos sin ver eclosiones ni vemos más truchas, así que decidimos poner fin a nuestra jornada. A nuestro regreso volvemos a ver un conjunto de truchas en los mismos claros, en este caso estamos en la orilla contraria, en la cual se hace difícil estirar nuestro bajo. No obstante, Antonio, escondido detrás de un árbol, consigue que una trucha tome su ninfa, pero no consigue prenderla. Tras un rato intentándolo enseguida dejamos de verlas.

Primera salida de la temporada y primer bolo, con un caudal adecuado un buen rio en el que probar en el futuro y con una amarga preocupación del estado tan lamentable de caudal en el que nos hemos encontrado el rio en el inicio de la temporada, que lógicamente irá a peor, lo que nos hace ser muy pesimistas para nuestra futuras salidas esta temporada.

  

Texto: Miguel Ángel Cenamor

Fotos: Santi, Antonio Cenamor

by PescataMinuta

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.