Este documento parte de conceptos básicos para transformarlo en consejos prácticos y recomendaciones que conforman una herramienta aplicable a gran mayoría de especies y situaciones, donde la filosofía del pescador apunte a la protección y conservación del rival, el pez.
No se trata de una guía de principios ecologistas, se trata de un compendio de consejos que logrará que el pescador pesque más sin causar daño. Tampoco se trata de hacer leyes de cómo actuar en estos casos, simplemente acercar información bien aconsejada y recomendando prácticas de menor impacto ambiental.
El pescador tendrá la oportunidad con dichos conocimientos de decidir que trato le dará al pez, desde la elección del equipo hasta la devolución a su medio.
Entendemos que si está leyendo este artículo, es un pescador que por norma utiliza la práctica de devolver al pez al agua. En ese caso, no está demás comprender aún mejor cuales son las pautas a seguir, para que su intención al menos esté acompañada de correctas instrucciones.
Procure manipular y tocar al pez lo imprescindible. Hacerlo le quitaría la mucosa protectora, que no deja de ser su primera defensa contra las agresiones del medio, contaminación, hongos, agentes patógenos, etc.
Procure hacerlo con suaves movimientos para no provocar el pánico en el pez.
Sin apretar, utilice la presión justa para que no se resbale, pero con cuidado de no lesionarlo por excedernos de fuerza. Así evitaremos producir estrés y daños superficiales o en órganos internos.
Nunca hay que mantener colgado al pez del anzuelo, ni del BogaGrip o herramientas similares, ya que puede producirle desgarros en determinadas partes blandas del pez. Además el BogaGrip puede perforar la membrana gular. Por otro lado puede producir traumatismos en la columna vertebral y en órganos internos por el peso de la contención, ya que la anatomía de los peces no está preparada para soportar la gravedad.
Nunca arrastre o deposite el pez en la tierra, la grava o la hierba, provocaría daños superficiales que aumentaría su mortalidad.
Tampoco introduzca los dedos en sus agallas.
Es recomendable el uso de una sacadera, esta herramienta tiene varias ventajas que ayudan a la captura y suelta:
- Disminuye la lucha del pez permitiendo que no se agote totalmente.
- Disminuye la posibilidad de romper el tippet, si éste es fino.
- Disminuye la necesidad de manipulación, impide golpes por caídas.
- Evita que se apriete al pez para que no se resbale.
- Elimina la necesidad de arrastrarlo para poder tomarlo.
- Facilita la extracción del anzuelo.
Su uso es sencillo y ameno para el pescador más novel, facilitando todo el proceso de captura y suelta. Las redes de las sacaderas hechas con nudos o materiales muy ásperos, no son adecuadas porque lesionan al pez, le quitan mucosa e incluso les pueden quitar escamas de la piel.
Si se usan guantes para manipular al pez, hay que procurar mojarlo antes de su utilización. Además procure lavarlo tras su uso, evitando que en él proliferen bacterias por la descomposición del tegumento que quedó en la tela o la aparición de hongos, lo que posteriormente puede transmitirse a otros peces que se capturen. Estas precauciones igualmente hay que tenerlas con las redes de las sacaderas.
Extracción del agua
Es muy importante no sacar al pez fuera del agua. No exponerlo al aire, evitando posiblescaídas accidentales. Si esto sucede, hay que tener en cuenta que a partir de los 15 segundos comienzan los daños neuronales del pez. Su prolongada exposición al aire y por consiguiente falta de oxígeno es una de las causas más frecuente de mortalidad. Sus principales causas son las lesiones cerebrales y daños en el aparato respiratorio.
Se debe tener especial atención a este punto por sus graves consecuencias.
Anzuelos
El anzuelo sin arponcillo o con éste aplastado minimiza el daño y aumenta notablemente la tasa de supervivencia. Es mucho más fácil y rápido quitarlo del pez, de la ropa o de nuestro cuerpo en caso de accidente. También contribuye a evitar el deterioro del montaje de la mosca durante el propio proceso de extracción, algo fundamental si no tenemos un repuesto de la mosca que en ese momento está funcionando en nuestra caja de moscas.
Otra ventaja adicional es que poseen mayor grado de penetración en las bocas duras de algunos peces, lo que mejora notoriamente la clavada. Pescadores experimentados aseguran que no es significativa la diferencia de picadas perdidas entre anzuelos con y sin arponcillo si se mantiene en forma constante la tensión sobre la línea.
Importante usar siempre anzuelos oxidables. En caso de rotura accidental del tippet el anzuelo oxidable pronto se corroerá en la boca del pez.
Tratar de usar anzuelos pequeños. Los grandes son fatales para los peces pequeños ya que les causan lesiones en ojos, cráneo o cerebro.
Extracción del anzuelo
Hay que tratar de extraerle el anzuelo al pez dentro del agua, sujetándolo con una mano del pedúnculo caudal y sacando el anzuelo con la otra.
Si el pez se tragó la mosca hay que llevarlo a aguas bajas, usando fórceps para empujar la mosca hacia atrás hasta soltarla. Evita lesionar al pez y no rompe la mosca.
Si está muy adentro y pese a los intentos no se puede sacar, en última instancia no lo dude, corte el tippet lo más cercano al ojo del anzuelo que pueda y deje que se vaya.
Estrés y cansancio
Trate que la lucha se prolongue lo menos posible para evitar extenuar al pez.
El uso de la sacadera acorta notablemente ese tiempo.
Usar un número de equipo adecuado a la talla de los peces que espera encontrar. Si no se sabe hay que informarse, siempre es mejor que sobre a que falte, le permitirá abreviar la lucha y causarle menos cansancio.
Usar el tippet más grueso que la situación permita. Con uno fino se tardará más tiempo en lograr traer al pez agotándolo en extremo y tenemos mayores probabilidades de corte, perdiendo la pieza y dejando un pez con una mosca clavada y un nylon colgando de la boca.
Si el pez es demasiado grande para el equipo y se ve que no se podrá acercar sin agotarlo completamente, considerar la posibilidad de dejarlo ir, por ejemplo aflojando la tensión de la línea para ver si el anzuelo se desengancha solo si está mal clavado.
Una forma de compensar un equipo liviano es caminar aguas abajo del pez usando la corriente para acercarlo. Con un equipo liviano luchar contra el pez y la corriente no es posible y lo que se logra es agotarlo más allá de lo razonable.
No hay que remolcar al pez hasta la orilla como si se tratara de un cabestrante, logrará traerlo rápido pero le generará un estrés que probablemente le cause la muerte tiempo después de ser liberado.
Durante el proceso de lucha, hasta la aproximación final y extracción del anzuelo, hay que procurar que el pez se golpee contra piedras, raíces o ramas. Estas acciones se deben hacer en aguas suficientemente profundas.
Un pez estresado se pone pálido por la acción de la adrenalina, boquea abriendo las agallas espasmódicamente y entra en una especie de colapso. En ese caso extreme las tareas de reanimación prolongándolas hasta que el pez recupere su balance natural y movimientos habituales.
Maniobras de recuperación
Siempre hay que efectuar maniobras de recuperación previas a dejar al pez en libertad, sobre todo si se pone de costado o panza arriba.
Mantener un rato enfrentado a la corriente sosteniéndolo suavemente de la cola y con la otra mano en la panza, para que el agua circule por sus agallas aumentando la oxigenación. Hay que asegurarse de que tenga la boca abierta.hay que hacer movimientos hacia delante y detrás, la circulación inversa del agua por sus branquias es antinatural y puede dañarle el aparato respiratorio.
En aguas quietas como las de lagos y lagunas hay que mover al pez hacia delante con la boca abierta para qué circule agua y se retire el aire de las cavidades, evitando siempre la circulación inversa.
Nunca realice esta acción donde el agua esté sucia.
Liberación
Hay que tratar de prolongar la recuperación hasta que se vaya escapando de nuestras manos por sus propios medios.
Tomar el tiempo que sea necesario, en ese momento podemos aprovechar para sacar fotos y medirlo sin sacarlo del agua.se sostiene no se debe apretar, mantener suavemente. Cuando se afloje la presión se debe sentir en la mano un movimiento ágil de la cola, ese es el momento en que partirá libremente.
Nunca tirar el pez al agua desde alto y mucho menos si son ejemplares de poco tamaño. Si lo sacó del agua vuelva a introducirlo suavemente.
Liberar al pez en una zona de corriente suave donde pueda terminar de recuperarse.
Hay que liberarlo siempre, incluso con dudas sobre recuperación. La satisfacción que se siente es inigualable y tal vez se puede volver a pescarlo. Aun cuando se hayan agotado todas las posibilidades de reanimarlo y no se logre, en esa desigual pelea al menos él habrá merecido terminar en su medio.
Aún muerto un pescado servirá a toda una cadena de organismos que en poco tiempo será alimento de muchos peces.
Recordar
- Si se van a sacar fotos hay que considerar la posibilidad de tomárselas mientras esta dentro del agua. Las fotos más bellas son aquellas en que el pez está en su medio y el pescador lo sostiene suavemente sin sacarlo. En el agua los peces lucen sus mejores colores que pierden si los sacamos.
- Si se saca el pez fuera del agua, que sea el menor tiempo posible, siempre en cuclillas o arrodillado y nunca sobre la tierra o piedras, si resbala que al menos caiga al agua y desde poca altura.
- Una consideración importante es la disminución del oxígeno en el agua provocada por temperaturas elevadas de ésta, eleva notablemente el porcentaje de muertes.
- Use anzuelos sin arponcillo o con éste aplastado. Oxidables, de tamaño pequeño (hasta # 6 para salmónidos).
- Use sacadera apta para pesca y devolución.
- Si se usan guantes, que estén húmedos antes de tomar al pez. Lavarlos bien cada día.
- No agotar al pez.
- Evitar que se golpee.
- Evitar el mal uso del Bogagrip.
- No mantener colgado al pez del anzuelo.
- No sacar al pez del agua y si lo hace que no exceda de 15 segundos cada vez.
- Tocar y manipular lo menos posible y nunca meter dedos en sus agallas.
- Antes de liberarlo efectuar maniobras de recuperación.
- Liberarlo en una zona de corriente suave, lejos de la orilla para evitar que el agua revuelta y sucia se introduzca en sus agallas.
- Aun teniendo dudas de si el pez logrará sobrevivir tras la captura, se debe liberar igualmente, de no sobrevivir pasará a integrar la cadena alimentaria sirviendo de alimento a otros organismos.
Reflexiones
«Un buen pez es demasiado valioso para ser capturado una vez» Lee Wulff
«Devolver un pez al agua en las mejores condiciones posibles no solo demuestra respeto por éste sino que mantiene vivo el desafío por pescarlo» A. Chacra Larroy
«La pesca es una relación de dos, la falta de uno significa definitivamente el fin del juego» Desconocido

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